En 2001 Mariana decidió venir a Montevideo a iniciar su formación universitaria. “Mi madre me dice que hay una carrera de Diseño Gráfico en ORT; yo no tenía mucha idea de la carrera. Vine a la charla informativa y me encantó. Desde chica me gustaba ir al supermercado y mirar los empaques de los productos, los logos, los folletos. Con el tiempo me di cuenta que lo que realmente me atraía era el diseño gráfico”.
“La carrera me gustó mucho, el primer año como que jugás, es una experimentación, después se empieza a complicar y varias veces me quedé sin dormir por las entregas”. Para Mariana “los desafíos estaban de acuerdo con lo que iba aprendiendo; ya avanzada en la carrera veía mis trabajos de primer año y notaba mi evolución gráfica”.
“Me acuerdo que cuando teníamos los obligatorios nos quedábamos después de las clases en los laboratorios haciendo los trabajos; éramos como ochenta y nos ayudábamos entre nosotros. Se formaba un ambiente muy lindo y estábamos todo el día en ORT”. Además, Mariana destacó la cercanía entre los alumnos y los docentes “más allá de las clases, los profesores venían, hablaban, daban consejos y eso estaba muy bueno”.
En 2002 comenzó a transitar sus primeros pasos en el campo laboral del diseño. “En el segundo año de la carrera, un conocido me pide que haga un logo. A pesar de que fue un trabajo chico, es uno de los que más me acuerdo porque fue el primero. Después fui agarrando trabajos freelance”. En 2004 comenzó a trabajar como diseñadora en la agencia Cinco Sentidos. “Al tiempo, en 2005, conseguí otro trabajo por una amiga que me recomendó en la agencia Pratt haciendo diseño de empaques. Al año siguiente empecé a trabajar en el estudio Siccardi Design, allí diseñaba folletos, libros y páginas web”.
Para Mariana su profesión está incorporada a su diario vivir: “estoy todo el tiempo pensando de qué forma comunicar algo, cómo es más original, la manera más creativa y cuando resuelvo eso lo tengo que bajar a un papel y ver cómo lo transmito, es un constante desafío con cosas nuevas”. Actualmente trabaja free lance. “No me gustan las rutinas y ahora estoy apostando a crecer”. Por el momento Mariana no tiene pensado volver a vivir en Maldonado. “Hoy para mí es más práctico estar en Montevideo ya que la movida en diseño esta acá”.
